Cuando alguien evoluciona
también evoluciona todo a su alrededor, cuando vemos la posibilidad de ser
mejores de lo que somos y nos lanzamos a la acción, todo a nuestro alrededor se
vuelve mejor, claro esto no es posible si no entiendes un simple pero poderoso
decreto “Tu siempre tienes el poder de elegir”. Tu siempre puedes decidir como
pensar (en que creer), como sentirte (que significado tienen los hechos) como
actuar (respondo o reacciono). Eres libre de decidir como pensar, en que creer
y como actuar. Todas las personas contamos con grandes mentes, todos sabemos
cómo pensar, todos sabemos enfocar ideas que cambien nuestra manera de ser,
todos sabemos evaluar, examinar, observar, podemos hacer que cualquier cosa
suceda, si tomamos decisiones con coraje, compromiso y una gran sabiduría para
entender que podemos estar equivocados (Ser flexibles).
Solo entendemos la vida,
cuando nos entendemos a nosotros mismo, normalmente oigo a la gente decir
quiero que mi esposo me entienda, es que ella no hace, y como no lo hace, yo
tampoco lo voy hacer. El hecho es que no podemos comprender a otros sino, nos
comprendemos a nosotros mismo, sino estudiamos nuestra vida, sino estudiamos
nuestra mente, lo que creemos, como evaluamos y por ultimo porque hacemos lo
que hacemos (Porque reaccionamos). Y mi invitación es para cuando termines de
leer este documento, te hagas las preguntas mágicas que dicen: ¿Cuánto conozco
de mi mente, de mis sentimientos, de mis reacciones cotidianas? ¿Por qué hablo
lo que hablo? ¿Cuál es el propósito de comunicar lo que comunico? ¿Cuál es el
propósito de mi vida? Y esto es por tres sencillas razones:
2. No solo para que puedas sentirte bien contigo, sino que puedas crear una relación de amor profundo con los seres que te preocupas, cuidas y quieres.
3. Para que puedas crecer, no importa en la relación en la que te encuentres (Trabajo, clientes, sociedad, amigos, socios)
Las relaciones de nuestra
vida siempre contemplan un desafío, un reto, sobre todo cuando se trata de
dominar nuestro cuerpo, nuestra mente y nuestra manera de sentirnos ante algo,
no te hablo de vernos confundido por lo que somos, te hablo de que toda
relación, empezando por la relación de yo-yo(conmigo mismo), implica un desafío,
por naturaleza solo podemos experimentar aquello que vemos, aquello que nos han
dicho, esto es lo que vas a sentir, si haces tal o cual cosa o si tienes un
novio o un hijo o una esposa o si tienes este carro o apartamento o casa, lo
cierto es que olvidamos lo esencial de la vida que es vivirla y experimentarla
desde nuestro propio ser, no por lo que dice un amigo o mama o papa, sino por
lo que experimentamos internamente, por el valor que sentimos al ver la vida
con agrado, aunque no sepamos porque nos pasa lo que nos pasa, no trata de la
evaluación de algo con el intelecto, trata de que estas experimentando en tu
corazón.
Entonces la pregunta
clave sería ¿Cuál es la diferencia entre alguien que se siente satisfecho y
disfruta de su relación consigo mismo y con los demás y otro que sufre por sus
relaciones? ¿Qué hace que una persona viniendo de un hogar amoroso se convierta
en un peligro para la sociedad? ¿Qué hace que una persona logre superar,
obstáculos, perdidas de familiares, incluso sufrir injusticia, y logre
construir relaciones amorosas y perdonar aquellos que le apresaron (Nelson
Mandela)? Sin duda alguna las personas que consigue una manera de relacionarse
consigo mismo de manera amorosa, inspiradora, flexible y creadora, logran
muchas cosas: Dinero, carros, casas, empresas, posiciones de poder, pero existe
un hecho que pocas veces se habla de él y que ya no habla del logro, sino más
bien de la satisfacción, de sentirse que algo tiene sentido, que es valioso, y
que puede contribuir con tu vida, con la de los demás, estas personas no solo
logran cosas, sino que sienten que lo que hacen, lo que dice y lo que obtiene
es valioso. Lograr algo es fácil, pero sentirse satisfecho con algo, no es
están fácil, porque involucra el poder de la relación (yo-yo).
El poder de la relación
trata de tres poderosos elementos que conforman toda relación:
1.
Comunicación.
2. Conexión o desconexión.
2. Conexión o desconexión.
3. Satisfacción y contribución.
Cuando le preguntas a
alguien porque termino con su pareja o a lo mejor has pasado por alguna
decepción amorosa, cuando le haces la pregunta ¿Por qué se acabo?
Las personas responden:
- Es que peleábamos mucho.
- Es que no entiende lo que le digo.
- No nos conocíamos lo suficiente.
- Nos casamos muy jóvenes.
- Es que su familia es española y nosotros somos venezolanos.
- Se nos acabo el dinero.
- No teníamos tiempo para compartir juntos.
- Me trataba mal.
- Sufría mucho.
- No tuvimos hijos.
- Ella es tauro o yo soy perro no
somos compatibles.
Podría hacer una lista
interminable de cosas que la gente me ha dicho por lo cual no han podido
continuar en una relación de pareja, sin embargo estas razones no son las
razones que determinan o no son las causas por las que las personas no se
relacionan de una manera satisfactoria, la razón radica en un simple problema
de comunicación. La mayoría de las personas que conozco les cuesta un mundo
hablar cuando se trata de expresar sus sentimientos de stress, la mayoría tiene
miedo a la hora de hablar y comunicar lo que sienten y lo que piensa, el factor
determínate no es la situación que vive la persona, sino su estilo de
comunicación así que lo que tienes
siempre que cuidar en una relación es la comunicación.
El oxigeno es a la vida
como la comunicación es a la relación, pero ¿Qué compone una comunicación? la gente piensa que
la comunicación son solo palabras, existe una comunicación más sutil, que
profundiza y toca cada célula, es como cuando escuchamos una canción que nos
gusta mucho, que le decimos a nuestro sistema nervioso me gusta, ahora canta, y
uno comienza a cantar, supongo que alguna vez has cantado una canción con todas
las fuerzas de tu corazón, de esa comunicación sutil, que se sustenta también
en imágenes, que nos dice esta canción es tal o cual color, cuando comunicamos
no solo hablamos sino que trasmitimos emociones y ese es el segundo poder de
una relación.
El poder de conexión o
desconexión, está en la forma como comunicamos nuestras emociones más
profundas, como las experimentamos, como las entendemos, como valoramos nuestras
emociones, incluso hasta las que nos producen un profundo dolor. Una emoción te
puede bloquear de tal forma que no puedas ver al ser amado, de tal forma que
produzca una desconexión que te provoque insultar, llorar o quedar paralizado
en un profundo temor. El poder de conectar comienza por valorar las emociones,
puedes estar molesto, sentir dolor, gritar y esa son emociones que deshabilitan
tu mente, el intelecto y dan paso a una desconexión con el corazón, trayendo
como resultado la desconexión con otros (pareja, hijos, papa, mama, familia etc.),
así son las emociones, pueden hacer que nuestro corazón se acelere, pero si
conseguimos la emoción correcta, si entendemos a esa fuerza invisible a la que
estamos sometidos, si elegimos desarrollar una emoción inspiradora, amorosa,
flexible, entonces nuestro cuerpo reaccionará de otra manera y podremos superar
tomo mal, en un relación.
Cuando conectamos con la
emoción adecuada podemos superar cualquier trauma, decepción, frustración o
desesperación de la vida, porque conectamos con la emoción correcta, esa que te
da lucidez, creatividad, ingenio, gracia, puedes llegarle a cualquier persona,
si una situación te molesta y te parece que son injusto con la manera de
tratarte, si conectas con la emoción adecuada entonces encuentras la manera de
sentirte mejor y conectar con los demás. Así que no es lo que te pasa sino como
conectas con lo que te pasa, si te deprimes te desconectas, si creas te
conectas.
¿Entonces que determina
tus relaciones? hemos dicho la comunicación, la habilidad para comunicarte,
también hemos hablados de las emociones, tu capacidad para experimentar la
vida, no desde mama o papa o desde el amigo o desde los científicos, sino desde
tu corazón, del valor que tienen tus pasamientos, tus emociones y tus acciones,
no reaccionamos al menos que conectemos o desconectemos con algo que vemos en
nuestra mente, el foco, eso que normalmente le prestamos atención, eso que
consideramos o que vemos como valioso, eso que nos da la máxima satisfacción de
la vida.
La satisfacción y la
contribución, van de la mano en la vida, la mayoría de las personas siente un
profundo vacio, en sus relaciones, su trabajo, consigo mismo, siento que no ha
hecho la tarea y que se le acabo el tiempo. Lo cierto es que la satisfacción y
la contribución, son frutos del enfoque y lo que consideramos valioso en
nuestras vidas. Cuando enfocamos en algo o en alguien, seamos consiente o no,
ese Foco comienza a tener prioridad, esa prioridad si esta desfocalizada como
en la mayoría de las personas que uno ve, esa prioridad crea una forma de
actuar que controla lo que sientes, pero no solo lo que sientes sino también
como piensas.
Estar focalizado
significa creer que algo es valioso, y si es valioso lo defendemos porque es valioso.
Ahora mismo tú tienes que decidir a dónde vas a dirigir tu foco y una vez que
lo hagas comienza tu contribución, tu capacidad de dar y porque sucede esto
porque en el momento que te focalices en algo en ese momento le das un
significado, le das un valor, le das una prioridad y cualquiera que sea el
significado que le des eso produce una emoción que conecta o desconecta, y esto
puede determinar el inicio o el final de algo ¿Esta Dios castigándome o
recompensándome o es el azar?, el foco es el que crea la emoción y por
consiguiente la conexión o la desconexión.
El foco se compone de
tres partes:
1.
Cuál es tu objetivo, ¿Qué
persigues? ¿Qué buscas?, tus deseos.
2.
En qué crees. Tus creencias más
profundas de lo posible o no, de lo que te causa sufrimiento o felicidad, seguridad
o duda, certeza o incertidumbre.
3.
Significados, lo valioso, lo
importante.
El foco conforma el punto
clave de la satisfacción y la contribución, la satisfacción parte de
necesidades que muchas veces se crean de maneras inconscientes o distorsionadas,
algunas personas piensan que cuando dan lo mejor de sí en sus relaciones,
trabajo o con los seres queridos, piensan que en cualquier momento saldrán
heridos, ¿Alguna vez has sido herido en una relación?, lo que por supuesto la
gente olvida es que cada situación por extraña que sea siempre tiene una
contribución, es lo que llamamos crecimiento, necesitas las relaciones para
crecer, es la misma alma en potencia, nuestra capacidad, de comunicar, conectar
y crecer.
Cuando hablamos de la
contribución, hablamos del suelo que necesita la semilla de la satisfacción
para hacer crecer el árbol de la felicidad, si el árbol no crece te sientes
horrible, sino da fruto sientes que perdiste tu tiempo, lo que no te das cuenta
es que aunque, no puedas ver el árbol, no quiere decir que sus raíces no estén
creciendo, mientras no vemos el árbol, sentimos que lo que estamos
contribuyendo no vale de nada, ahora si le preguntaras a las raíces, te dirían
que gracias a tu presencia este mundo es un lugar mejor.
Porque la verdadera
satisfacción está en la capacidad para contribuir mas allá de nosotros mismo,
porque todos sabemos que el mundo es un equipo, no son equipos separados, todos
sabemos que el arte de la vida consiste en nuestra capacidad de contribuir, que
la vida no se compone del yo, sino del nosotros de la capacidad de comunicar,
conectar y contribuir que nos ofrece la vida a través de las relaciones, es un
llamado que toca el corazón.
Pero porque la gente no
está interesada en contribuir, una de las razones es su forma de ver la vida, a
lo que le prestan atención continuamente, las personas en su rutinas diarias
tienen experiencias que lo condicen a sentirse mal, vacio, frustrados, solos,
desde ahí es difícil cambiar el foco, porque queremos que alguien nos comprenda,
nos ame, nos valore, seguramente tú conoces a alguien que sin importar lo que
suceda siempre esta de mal humor. Lo más increíble es que todo esto puede
cambiar, si estamos decididos a valorar lo que pensamos, lo que sentimos y
nuestra capacidad de dar lo mejor de nosotros, nuestra capacidad para conectar
con el amor interno y conectar con el amor de los demás
En un mundo más pequeño
no existe espacio como lo percibimos, en un mundo más pequeño todos estamos
conectados, esto no lleva a una conclusión, cuando usted sana otros sanan,
cuando su mente está clara, la mente de otros brilla, cuando su corazón está
dispuesto a conectar con el amor sus relaciones son amorosas.
Un día el Dalai Lama
subió al escenario y dijo: “Nuestro mayor deber es ayudar al prójimo y si no
pueden ayudar, por favor no hagan daño, si cada uno de los aquí presentes
dijéramos: Yo no sirvo para ir ayudar a la gente, pero prometo que jamás he de
herir a nadie, al menos intencionalmente”. Sé que existe lo feo, pero también está
la belleza, sobre todo la belleza que conecta con las ganas de contribuir y
hacer que este mundo sea un mundo mejor. El poder de una relación se sustenta
en la capacidad que tengas para contribuir.
Hasta un nuevo conectar.
Muchas gracias por la contribucion que le haces a mi vida...
ResponderBorrarhaces una excelente labor en el adisestramiento de lideres...
GRACIASSSSSSSS!!!!!!!!!!!!!!!..........
Georgina Gavarrete
QUE HERMOSO Benito!! gracias por ensenarnos cada dia mas con tus verdades..
ResponderBorrarUn abrazo
Gracias a ustedes por leer esta nota...
ResponderBorrarGracias Benito, que liberador es leer tus palabras, y sentirme conectada contigo, con tu forma de expresar la vida.
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